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Sonreír en el trabajo a fuerza, te llevará al alcoholismo

Ya todos sabemos que en el lugar del trabajo, tenemos que ser políticamente correctos, pero cuando te tragas situaciones o corajes dentro de tu horario laboral y lo maquillas con una sonrisa, te puede llevar a convertirte en un alcohólico.

Una investigación publicada en el Journal of Occupational Health Psychology indica que suprimir las expresiones que delatan emociones de malestar en el trabajo provoca que las personas beban más alcohol cuando salen del trabajo.

El estudio lleva por nombre ‘When are fakers also drinkers? A self-control view of emotional labor and alcohol consumption among U.S. service workers’ donde se basaron en 1,592 empleados que tienen contacto diario con personas externas.

Los resultados alojaron que en general, la actuación en la superficie, estaba fuertemente relacionada con el consumo excesivo de alcohol y la rutina de beber después del trabajo.

Las personas que tienen un nivel de autocontrol bajo pueden volverse más propensos a beber mayores cantidades de alcohol.

Durante la investigación se les preguntó cuántas veces al día tenían que beber sonrisas, cuánto bebían después del trabajo y cuán impulsivos se consideraban. La correlación entre las veces que tuvieron que aparentar sonrisas con la cantidad de bebidas alcohólicas arrojó grandes sorpresas.

Pero esa actitud es más presente en aquellas personas cuyo trabajo está más orientado al servicio al cliente, y tener que sonreírle a los clientes por las mañanas lleva a las personas a perder el control por las noches y acabar con una copa en la mano.