Foto: Unsplash

A pesar de ser uno de los países más fuertemente golpeados por la pandemia de COVID-19, India ha logrado experimentar un crecimiento.

A pesar de ser uno de los países más fuertemente golpeados por la pandemia de COVID-19, India ha logrado experimentar un crecimiento de un 20.1% en el segundo trimestre del año (de abril a junio), según cifras publicadas por el gobierno de Narendra Modi. Se trataría de la mayor expansión económica desde que se comenzó a utilizar el formato trimestral para medir el PIB, en 1996. Asimismo, estos números difieren significativamente de los del primer cuarto del año (de enero a marzo), cuando se registró un modesto incremento de apenas 1.6%.

No obstante, los analistas se muestran cautelosos ante lo que podría parecer un nuevo “boom” de la economía india. Es importante resaltar que, durante los meses de abril y junio de 2020, el gigante asiático impuso uno de los confinamientos más grandes del planeta, lo cual repercutió en una catastrófica contracción económica de un 24.4% a lo largo de dicho período (7.4% para todo el año). Por ende, en comparación con el pasado, las cifras del presente año lucen extremadamente favorables. No obstante, por ejemplo, el nivel de actividad comercial e industrial todavía es casi un 10% menor al registrado en 2019, en una época en la que la pandemia era aún un escenario desconocido.

Los economistas aseguran que la causa principal de este pico alto de crecimiento es la reactivación de sectores como la agricultura, la manufactura y la construcción, los cuales han regresado progresivamente a sus labores productivas. Empero, la lentitud en los programas de vacunación (apenas un 11% de los 1.372 millones de habitantes han sido inmunizados) y la alta probabilidad de experimentar una tercera ola de contagios causan preocupación entre los expertos.

Por otro lado, en un mercado doméstico en el que desde el inicio de la pandemia se han perdido alrededor de 10 millones de empleos, es difícil hablar de una recuperación total. De acuerdo con el diario India Times, la administración de Modi se vio forzada a vender activos estatales valorados en 81 mil millones de dólares, con el propósito de generar ingresos. Por tal motivo, en la opinión de estudiosos como Mahesh Vyas, del Centro de Monitoreo Económico de la India, es preciso realizar una serie de ajustes estructurales para lograr un verdadero reflorecimiento de la quinta economía más importante del mundo.

“La única solución es incrementar el financiamiento y el apoyo al sector privado. Este sector está desmotivado porque aún no existe la suficiente demanda. Eso es lo que aún no permite que la India logre un mayor crecimiento”, aseguró Vyas.