El período de gracia de 30 días para reembolsar 82.5 millones de dólares en pagos de cupones vencidos culminó este martes.
El gigante chino de la construcción Evergrande, cuyas deudas alcanzan sumas astronómicas, incumplió por primera vez una fecha límite para reembolsar a algunos de sus acreedores en el extranjero, según diversos reportes publicados este martes. Esta situación plantea la posibilidad de que termine en una cesantía de pagos mientras se prepara para una mega reestructuración respaldada por el gobierno nacional.
El período de gracia de 30 días para reembolsar 82.5 millones de dólares en pagos de cupones vencidos culminó este martes, y se pudo conocer que algunos tenedores de bonos todavía no habían recibido el pago. Dichos cupones vencían inicialmente el 6 de noviembre, con un período de gracia de un mes, y el incumplimiento inicial de Evergrande había acrecentado aún más las preocupaciones con respecto a su futuro y al del mercado inmobiliario chino en general.
El año pasado, el gobierno de Xi Jinping generó una crisis en el sector inmobiliario cuando decidió iniciar una campaña para frenar la deuda excesiva acumulada entre Evergrande y otras firmas inmobiliarias. Las empresas que habían recurrido a préstamos para acelerar su expansión se encontraron de repente con serios recortes presupuestarios, por lo que comenzaron a luchar frenéticamente para completar proyectos y cumplir con sus compromisos económicos.
Evergrande, con una deuda acumulada de más de 300.000 millones de dólares, es la empresa más destacada que ha cedido bajo esta política, pero otras también han sufrido.
Cabe resaltar que la industria inmobiliaria es uno de los principales impulsores del crecimiento de la segunda economía más grande del mundo, y la crisis de la deuda ha suscitado temores de una repercusión en otros sectores clave.
Mientras Evergrande continúa intentando capear el vendaval, el gobierno chino dijo estar listo para asumir un papel de liderazgo en la reestructuración. Después de que la constructora asegurara el pasado viernes que es posible que no pueda cumplir con sus obligaciones financieras, desde Pekín realizaron un llamado al fundador de la empresa y anunciaron varias medidas que han ofrecido un panorama más claro de las perspectivas gubernamentales para poner fin a la crisis.
En este sentido, no solo desde Pekín están siguiendo de cerca el asunto. El gobierno provincial de Guangdong también ha enviado un equipo de trabajo a la empresa, que según diversos analistas podría indicar una “posible adquisición de Evergrande”.
Esto se ve reforzado por el anuncio realizado por la compañía a principios de esta semana sobre la creación de un “comité de gestión de riesgos” conformado por siete personas, que solo involucraría a dos ejecutivos de la empresa; el resto serían funcionarios estatales.
