
El reconocido cantante estadounidense Justin Timberlake anunció la semana pasada que ha sido diagnosticado con la enfermedad de Lyme, un trastorno inmunológico transmitido por la picadura de garrapatas que ha experimentado un aumento significativo en buena parte del territorio de Estados Unidos.
Mediante un mensaje publicado en su cuenta de Instagram, Timberlake admitió que en los últimos meses había sufrido intensos dolores nerviosos y fatiga extrema durante sus presentaciones, síntomas que sirvieron para comprender mejor su diagnóstico.
Esta noticia llega luego del cierre de su gira Forget Tomorrow, iniciada en abril de 2024 tras el lanzamiento del álbum Everything I Thought It Was. De acuerdo con Billboard, a lo largo de sus 41 conciertos, la gira recaudó más de 73 millones de dólares hasta el pasado mayo.
Durante el tour, algunas personas criticaron al artista por mostrar un rendimiento menor al esperado, notando que parecía sumamente agotado sobre el escenario.
Frente a estos comentarios, Timberlake confesó que en su momento sopesó la opción de cancelar la gira, pero decidió continuar debido a que “la alegría que me brinda actuar supera con creces el estrés que sentía.
“Me alegra haber podido seguir adelante”, añadió.
La noticia fue recibida con una ola de apoyo por parte de sus seguidores, quienes le transmitieron sus buenos deseos y le auguraron una pronta recuperación.
“Te queremos mucho y te apoyaremos en lo que sea que decidas hacer”, expresó una de sus seguidoras.
El exintegrante de N’Sync, de 44 años, no es el primer músico famoso en compartir su experiencia con la enfermedad de Lyme. Avril Lavigne, Justin Bieber y Shania Twain también han revelado públicamente su lucha contra esta afección, que puede prolongarse durante meses o años.
La enfermedad de Lyme generalmente provoca síntomas como sarpullido, fiebre, escalofríos, fatiga y dolores musculares y articulares. De no tratarse a tiempo, puede derivar en complicaciones crónicas como problemas cognitivos o del habla e hinchazón articular.
El reciente aumento de casos en Estados Unidos parece estar vinculado a la proliferación de garrapatas, que puede verse potenciada por los veranos más cálidos. Según el Centro para Control de Enfermedades (CDC), entre mayo y junio se registró el mayor número de urgencias por picaduras de garrapatas desde 2019.
El diagnóstico la enfermedad de Lyme suele confirmarse mediante pruebas de laboratorio específicas, y su tratamiento suele incluir antibióticos como la amoxicilina o la ceftriaxona. No obstante, la elección de los medicamentos dependerá de la fase de la enfermedad.