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Las atletas podrían mejorar en cuanto a los desajustes hormonales que afectan su ciclo menstrual.

“El deporte es lo que causa la anomalía”, explicó el doctor Pedro Manonelles, presidente de la Sociedad Española de Medicina del Deporte a la agencia Efe, para hacer referencia a las alteraciones que sufre el ciclo menstrual de las deportistas, en particular las de alto rendimiento, que ven su cuerpo más afectado en la búsqueda de la excelencia.

Términos médicos como amenorrea, oligomenorrea o disfunción de la fase luteal son los más conocidos por mayor de las atletas; sin embargo, el confinamiento en el que se encuentran las deportistas debido a la cuarentena por coronavirus, podría poner fin o al menos aminorar las irregularidades menstruales de estas mujeres.

“Si el estado de alarma se prolonga, como parece, más de dos meses, es fácil que muchas deportistas mejoren o normalicen su situación menstrual durante ese tiempo”, afirmó Manonelles.

De tal forma, el ciclo experimentaría una “nueva normalidad” a la que no está acostumbrado. Por lo tanto, la llegada de la menarquía (fecha de la primera menstruación), el regreso de la menstruación después de una etapa de amenorrea, es decir, de ausencia; o la vuelta a un ciclo de 28 días y el fin de la oligomenorrea o ciclo menstrual más largo de la habitual son posibilidades que podrían experimentar las deportistas que se encuentran aisladas.

Por su parte, Manonelles expuso que las alteraciones menstruales llegan con el ejercicio a un nivel deportivo muy alto o un control de peso muy estricto. De acuerdo con el doctor, la alteración es directamente proporcional al nivel de ejercicio.

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“Es curioso que los cambios en este caso se den al revés: el descenso de la actividad es lo que trae la normalidad”, agregó.

Manonelles también aclaró que la normalización del ciclo menstrual dependerá del ejercicio que haga la deportista en casa, aunque estimó que difícilmente sería comparable a su actividad habitual, por lo que una reducción en el esfuerzo es necesaria.

“Si se mantienen, las alteraciones revierten o mejoran”, señaló el doctor, quien también añadió que los cambios hormonales dependen de la intensidad del ejercicio y de la morfología corporal de quien practica el deporte.

La disciplina en la que se desempeña cada atleta incide directamente en este desajuste, por lo que las consecuencias que sufre una corredora de maratón no es la misma que la de una gimnasta.

Por otro lado, Lucía Guisado, seleccionadora española de gimnasia artística, apuntó que sus deportistas no han referido ninguna incidencia relacionada con su menstruación durante este confinamiento.

No obstante, la seleccionadora acotó que, durante algún paro en sus actividades deportivas, como una lesión o vacaciones, algunas deportistas mencionaron haber tenido cambios en su ciclo menstrual.