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La OTSC arribaron a Kazajistán el 6 de enero para contribuir a disuadir los focos de violencia que asolaban a diversas ciudades de la república centroasiática.

El gobierno de Kazajistán ha anunciado que las fuerzas militares rusas que llegaron la semana pasada regresarán a su país a partir del 13 de enero, luego de poner punto final a las violentas protestas en las que 164 personas perdieron la vida y 8000 resultaron detenidas.

Unos 2.500 soldados de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), una alianza liderada por Rusia que incluye a efectivos de Kirguistán y Tayikistán, arribaron a Kazajistán el 6 de enero para contribuir a disuadir los focos de violencia que asolaban a diversas ciudades de la república centroasiática.

Kazajistán solicitó la asistencia del pacto regional el mismo 2 de enero, tras la expansión de las protestas que comenzaron en la provincia de Mangistau (occidente), reconocida por ser productora de combustibles. No obstante, las manifestaciones más grandes y los mayores episodios de violencia se produjeron en Almaty, la ciudad más poblada del país.

Después de sofocar las protestas, las tropas de CTSO retornarán paulatinamente a sus naciones de origen en un período de 10 días que comienza el próximo 13 de enero, según afirmó el presidente kazajo, Kassym-Jomart Tokayev, en una comparecencia ante el parlamento.

“El objetivo principal de las fuerzas de paz de la OTSC ha sido completado exitosamente”, dijo Tokayev.

Durante los disturbios, los manifestantes, que en un principio protestaban contra la eliminación del límite de precio del gas licuado, terminaron asaltando diversas oficinas del gobierno, incendiando propiedades estatales y sosteniendo fuertes enfrentamientos con las autoridades policiales.

A raíz de la espiral de violencia, el ejecutivo decidió suspender el acceso a internet y declaró el estado de emergencia. Hasta el pasado lunes, al menos 164 personas habían perecido.

De acuerdo con Tokayev, el levantamiento debe ser calificado como un intento de golpe de estado y no una expresión espontánea de descontento. Igualmente, profirió elogios hacia Rusia, su mayor aliado, por salir en defensa de su gobierno.

Cabe destacar que el lunes, en una comparecencia ante los medios, el mandatario ruso Vladimir Putin afirmó que Kazajistán fue atacado por “terroristas” y “fuerzas extranjeras”, sin dar mayores detalles.

Actualmente, Rusia sigue intentando contener los disturbios en dos frentes: Kazajistán en su frontera sur y las crecientes tensiones con Ucrania y Estados Unidos en su frontera occidental.

Rusia ha estado acumulando durante semanas una gran presencia de tropas en la frontera con Ucrania, una medida que, según Putin, es en respuesta a la expansión de la OTAN hacia el este y la presencia de la artillería estadounidense en Ucrania.

En un intento por reducir las tensiones, diplomáticos estadounidenses y rusos se reunieron el lunes para conversaciones de emergencia en Ginebra, Suiza.

Durante la reunión de ocho horas, los funcionarios rusos dijeron que Moscú no tenía intención de invadir Ucrania. Estados Unidos dijo que no negaría a Ucrania, ni a ningún otro país del bloque oriental, la entrada a la OTAN solo porque Rusia se sintiera amenazada.