En el Reino Unido han fallecido siete personas a causa de coágulos de sangre de sangre después de haber recibido la vacuna de AstraZeneca contra la COVID-19.
En comunicado publicado por la agencia de noticias EFE, un portavoz de la Universidad de Oxford explicó que han decidido esperar antes de continuar probando la efectividad de la vacuna en niños y adolescentes debido a los casos de trombosis que podrían estar relacionados con la aplicación de la dosis desarrollada por AstraZeneca.
En el mismo texto, afirmaron que, aunque no hay preocupación sobre la seguridad en el ensayo clínico pediátrico, Oxford decidió esperar a tener información adicional por parte de la MHRA, agencia reguladora del medicamento en el Reino Unido, por cuanto a su investigación sobre los “raros casos de trombosis” antes de continuar con la administración de la vacuna.
El portavoz de la universidad, también señaló: “Padres y niños deberían seguir yendo a todas sus visitas previstas y pueden contactar los lugares de las pruebas si tiene cualquier duda”.
A pesar de este anuncio, la universidad ha dejado en claro que no se trata de una finalización en los ensayos, si uno una pausa temporal hasta tener conclusiones del regulador. Sin embargo, los casos que se han registrado de trombosis tras la administración de las dosis de la vacuna han generado una creciente desconfianza en el Reino Unido por cuando a la efectividad real de la vacuna, que ya ha sido administrada a la mayoría de los ciudadanos británicos, al menos una dosis.
Por su parte, el Gobierno británico ha instado a los ciudadanos a continuar con el proceso de vacunación cuando sean citados, ya sea para recibir la dosis de AstraZeneca o la de Pfizer, que son las únicas aprobadas hasta el momento en el territorio.
En el Reino Unido han fallecido siete personas a causa de coágulos de sangre de sangre después de haber recibido la vacuna de AstraZeneca contra la COVID-19. En relación con esto, la MHRA explicó que se han registrado 30 casos de raros coágulos entre los 18,1 millones de personas vacunadas hasta finales de marzo.
De los 30 fallecidos, 22 han sido diagnosticados con trombos cerebrales venosos, mientras las otras ocho personas fallecieron por problemas relacionados con la coagulación de sangre con bajo nivel de plaquetas.
Por otro lado, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos suspendió la fabricación de la vacuna de AstraZeneca en una planta de Baltimore, luego de que tuvieran que descartarse 15.000.000 de dosis del inmunizante de Johnson & Johnson después de haberse mezclado los componentes de esta fórmula con la de AstraZeneca.
La empresa lanzó un comunicado en el que apuntó que continuará sus operaciones en una planta distinta a la de Baltimore, pero no han afirmado aún a dónde se trasladarán.
