Donald Trump
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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó la semana pasada el retiro de la protección del Servicio Secreto para la exvicepresidenta y aspirante demócrata de cara a las elecciones de 2024, Kamala Harris. La instrucción quedó plasmada en un memorándum dirigido a la Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, con fecha del jueves 28 de agosto de 2025. Según la misiva, a partir de este lunes 01 de septiembre se “suspenderán los procedimientos de seguridad adicionales a los exigidos por la ley” para Harris.

Por mandato federal, los exvicepresidentes gozan de cobertura del Servicio Secreto durante seis meses después de dejar el cargo. En el caso de Harris, ese plazo venció el pasado 21 de julio; sin embargo, el expresidente Joe Biden había definido, de forma privada, que ese beneficio fuese extendido hasta enero de 2026 mediante una orden ejecutiva que no se había hecho pública hasta ahora. De esta manera, la orden de Trump anula de raíz aquella ampliación excepcional.

El documento oficial, titulado “Memorando para la Secretaria de Seguridad Nacional”, insta a que cualquier despliegue de agentes o recursos por encima de lo estipulado en la normativa sea cesado a partir del 01 de septiembre.

Respecto a esta situación, Kirsten Allen, asesora principal de Harris, emitió un comunicado en el que agradeció el profesionalismo y la dedicación del Servicio Secreto durante el periodo de protección extendido. “La exvicepresidenta Kamala D. Harris valora de manera profunda el compromiso inquebrantable de sus agentes con su seguridad”, expresó Allen, quien omitió detalles sobre el nuevo esquema de seguridad de Harris.

Por su parte, el gobernador de California, Gavin Newsom, una de las principales figuras del Partido Demócrata, fue informado de la decisión el mismo jueves por la noche y, a través de su portavoz, criticó la actuación de Trump. “La seguridad de nuestros servidores públicos nunca debe estar controlada por decisiones políticas erráticas y vengativas”, afirmó su portavoz, quien también indicó que la oficina del gobernador estaba evaluando opciones de protección a nivel estatal o local para Harris, quien reside en la ciudad de San Francisco.

En Los Ángeles, la alcaldesa Karen Bass aseguró haber contactado a Newsom para coordinar estrategias de seguridad para Harris cuando esta se encuentre en la ciudad. Bass tachó la decisión de Trump como “otro acto de venganza política” que se suma a las “represalias como despidos y cancelaciones de autorizaciones de seguridad”.

Esta orden del presidente republicano llega justo cuando Harris planea iniciar una gira nacional para presentar sus memorias, tituladas 107 Days, que saldrán a la venta el próximo 23 de septiembre. La dirigente tiene programado visitar un total de quince ciudades estadounidenses, aunque sin el respaldo federal de protección policial podría verse obligada a rediseñar su periplo.