El boxeador australiano Tim Tszyu sorprendió a propios y extraños al sufrir una inesperada derrota por nocaut contra el invicto ruso Bakhram Murtazaliev en un combate por el título superwelter de la FIB escenificado en el Hotel Caribe Royale de Orlando, Florida.
Las cosas comenzaron a ir mal para Tszyu apenas en el primer round, cuando fue dañado por un golpe que en un primer momento pareció ser un cabezazo. Sin embargo, en el segundo round, Murtazaliev aprovechó su altura para conectar a su rival con potentes combinaciones que hicieron que este visitara la lona hasta en tres oportunidades.
Para diversos especialistas, la contienda debió terminar en ese mismo momento, pero tanto Tszyu como su esquina decidieron salir para el tercer episodio. No obstante, era evidente que el nativo de Sídney estaba todavía muy aturdido, por lo que las fuertes manos de Murtazaliev penetraban fácilmente su vulnerable guardia. Esto derivó en una cuarta caída para el australiano, que se levantó con piernas tambaleantes, pero no dejó de luchar. Al final, la presión del ruso amenazaba con derribar por quinta vez a Tszyu, pero su esquina decidió lanzar la toalla para evitar que recibiera más castigo.
“Cada vez que me subo a un ring, lo hago con la intención de dejar la vida”, expresó Tszyu, visiblemente conmovido, ante la prensa. “Hoy no tengo excusas. Después del primer golpe, supe que las cosas no irían como lo habíamos planeado”, añadió.
Tszyu, de 29 años, aspiraba a unirse a su padre Kostya, miembro del Salón de la Fama, para convertirse en la segunda pareja de padre e hijo que lograban ganar dos títulos mundiales de boxeo. Kostya, de 55 años, había decidido viajar a Florida desde su residencia en Moscú, y por primera vez desde 2016 estaba acompañando a Tim en su esquina, luego de haberse distanciado por varios años tanto de él como de su hermano Nikita, tres años menor, quien también es boxeador profesional.
Tszyu pensaba utilizar este combate contra Murtazaliev para recuperarse de la primera derrota de su carrera frente a Sebastián Fundora en marzo, en un pleito sangriento donde un gigantesco corte en su cabeza obstaculizó su visión.
Antes de enfrentar a Murtazaliev, había estado en negociaciones para verse las caras con el prospecto Vergil Ortiz Jr en agosto, pero esta pelea tuvo que ser cancelada por recomendación médica, ya que Tszyu necesitaba más tiempo para sanar su corte en la cabeza.