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Este jueves, Aire France-KLM publicó sus resultados de 2020.

Uno de los sectores que se ha visto más afectado durante la pandemia ha sido el aeronáutico, teniendo en cuenta las limitaciones que ha habido desde comienzos del año pasado, como el cierre de fronteras o las restricciones para trasladarse de un país a otro.

Este jueves, Aire France-KLM publicó sus resultados de 2020, en los que ilustran cómo fue para esta aerolínea el año pasado. La compañía franco-holandesa perdió 7.100 millones de euros. De igual forma, el fabricante Airbus se ha visto fuertemente afectado, a la vez que ha registrado pérdidas netas que alcanzan los 1.100 millones de euros, mientras sus previsiones para un futuro cercano son pesimistas.


La aerolínea, por su parte, tiene un duro camino para recuperarse. En relación con su desempeño en 2019, 2020 representó en la caída del 59 por ciento en su facturación. En este sentido, Air France-KLM admitió que el primer trimestre de 2021 sería difícil y que la recuperación de la actividad, lenta, por lo que empezaría a notarse una diferencia real entre el segundo y tercer trimestre de este año, esto debido a las vacunas que ya han comenzado a ser aplicadas.

De por sí, incluso antes de la emergencia sanitaria, el grupo estaba presentado dificultades para sobrevivir en un escenario sumamente competitivo. La aerolínea ya había visto disminuir su número de pasajeros en un 67,3 por ciento, mientras que los préstamos concedidos por los gobiernos francés y holandés han servido para evitar el hundimiento de la empresa.

No obstante, su continuidad era casi imposible teniendo en cuenta cómo se había paralizado este sector y la cantidad de aviones que se mantenían en tierra. Por lo que, aún con las ayudas estatales, tanto Air France como KLM se vieron obligadas a implantar planes drásticos de reducción de personal para poder mantenerse.

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Otro factor importante en los problemas económicos del grupo ha sido la compra anticipada de queroseno. A pesar de ser una práctica habitual en el sector, en esta ocasión, resultó siento todo lo contrario teniendo en cuenta la caída en el precio del crudo, por lo que se estima que, debido a esto, se han perdido 595 millones de euros.

Asimismo, un factor adicional ha sido la depreciación de la flota, que trajo consigo la retirada de modelos de gran capacidad como el Airbus A380, el A340 y el Boeing 747, lo que supuso una pérdida de 672 millones de euros adicionales.

La empresa, por su parte, dijo: “Los resultados del 2020 atestiguan la resiliencia de Airbus en la crisis más severa que ha conocido la industria aeroespacial”. También, agregó: “En nuestra industria subsisten numerosas incertidumbres en el 2021, pues la pandemia seguirá impactando en nuestras vidas, en nuestras economías y en nuestras sociedades”.