Una rara carta que Franz Kafka le envió a su editor arroja nuevas luces sobre los problemas que enfrentó el escritor bohemio para plasmar sus ideas, sobre todo después de ser diagnosticado de tuberculosis.
“Cuando las preocupaciones permean hasta cierto nivel en la existencia, es evidente que la escritura y las quejas cesan”, escribió Kafka. “Hace tres años que no escribo nada; lo que actualmente se está publicando no es más que un montón de cosas viejas. No tengo otro trabajo, ni siquiera uno ya comenzado”, agregó el autor de “La Metamorfosis”.
Gabriel Heaton, especialista en manuscritos de la casa de subastas londinense Sotheby’s, que en los próximos días pondrá nuevamente a la venta la carta luego de 11 años, opina que es muy probable que la tuberculosis haya exacerbado su estancamiento mental y su sentimiento de impotencia. Asimismo, asegura que el hecho de que Kafka haga referencia a su producción literaria en una de sus cartas “es bastante inusual”, y piensa que revela “un contenido significativo que realmente nos muestra a él como persona y nos da una sensación de individualidad”.
Los expertos estiman que el manuscrito estaría fechado entre abril y junio de 1920, cuando Kafka estaba recibiendo tratamiento en Italia. Escrito en un alemán educado y legible, se cree que podría ser la respuesta de Kafka a la solicitud de su editor, Albert Ehrenstein, para que realizase contribuciones a la revista expresionista Die Gefährten (“Los becarios”, en alemán), de la cual estaba a cargo en ese momento.
Es probable que Ehrenstein haya visto la publicación de “Un médico rural” como una señal de que Kafka estaba trabajando activamente, algo que el bohemio desmintió en la misiva.
De acuerdo con Heaton, resulta “conmovedor y significativo” que sea Kafka quien “haga referencia al bloqueo del escritor”, toda vez que “es casi como el máximo laureado del bloqueo del escritor, como se puede ver en sus diarios”.
En los últimos años, la demanda de cartas escritas por Kafka ha crecido de forma sostenida, por lo que se espera que el lote actual alcance un valor de entre 70.000 y 90.000 libras esterlinas (89.000 a 115.000 dólares estadounidenses).
Esta subasta coincidiría con la conmemoración del centenario de la muerte del escritor el 3 de junio, lo que ha generado un renovado interés por sus obras, así como por películas biográficas y exposiciones.
Kafka falleció a los 40 años en 1924, luego de una larga lucha contra la tuberculosis. La carta fue conservada por Ehrenstein hasta 1948, cuando decidió dársela a la artista Dolly Perutz, quien huyó hacia Estados Unidos a raíz de la ocupación nazi de Checoslovaquia en 1938.