
El presentador de Fox News, Brian Kilmeade, se disculpó públicamente este domingo tras haber emitido comentarios polémicos días antes en los que sugirió que las personas sin hogar y con enfermedades mentales deberían ser ejecutadas. Las declaraciones, realizadas durante una emisión del programa Fox & Friends, generaron una ola de críticas y llamados a su despido por parte de figuras públicas y organizaciones civiles.
El incidente ocurrió en medio de una discusión sobre el asesinato de Iryna Zarutska, una joven ucraniana apuñalada en un tren de Carolina del Norte en agosto. El presunto agresor, con antecedentes psiquiátricos y múltiples arrestos previos, fue señalado como ejemplo por los presentadores para debatir sobre políticas de seguridad pública. Durante la conversación, Kilmeade respondió a una propuesta de encarcelamiento con una sugerencia de ejecución, lo que provocó una reacción inmediata en redes sociales y medios de comunicación.
La controversia se intensificó por el contexto político en el que se produjo. Horas después de esa emisión, Charlie Kirk, director ejecutivo de Turning Point USA, fue asesinado en un evento en Utah. En los días siguientes, varias figuras mediáticas enfrentaron sanciones por comentarios relacionados con el activista conservador. Sin embargo, Kilmeade conservó su puesto en Fox News, lo que generó comparaciones con otros casos, como el del analista Matthew Dowd, despedido por MSNBC tras vincular la retórica de Kirk con el clima de violencia política.
Dowd, quien también ofreció disculpas, denunció posteriormente haber sido blanco de una campaña de presión por parte de medios de derecha. Su despido y el mantenimiento de Kilmeade en Fox News han sido señalados por críticos como evidencia de un doble estándar en el tratamiento de discursos controvertidos, especialmente cuando involucran figuras conservadoras.
El asesinato de Zarutska ha sido utilizado por sectores republicanos para reforzar sus críticas a las políticas demócratas en ciudades con altos índices de criminalidad. Sin embargo, estudios recientes contradicen la narrativa que vincula directamente la falta de vivienda y la enfermedad mental con la violencia. Investigaciones muestran que las personas sin hogar son más propensas a ser víctimas que perpetradores de delitos, y que los trastornos mentales no son indicadores confiables de conductas violentas.
La disculpa de Kilmeade, emitida en una edición posterior del programa, reconoció el carácter insensible de sus palabras y buscó distanciarse de generalizaciones sobre poblaciones vulnerables. A pesar de ello, el episodio ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de los medios en la difusión de mensajes extremos y el impacto que estos pueden tener en la percepción pública y en la formulación de políticas sociales.
