El rapero estadounidense Kanye West, ahora conocido como Ye, ha revelado que durante muchos años fue diagnosticado erróneamente con trastorno bipolar y que, tras una nueva evaluación, se le ha diagnosticado autismo. Este cambio en su diagnóstico fue impulsado por su actual esposa, la modelo australiana Bianca Censori, quien sugirió que buscara una opinión médica diferente, señalando que algunos de sus comportamientos no encajaban con la bipolaridad.
El nuevo diagnóstico ha permitido a West comprender mejor ciertos patrones de su comportamiento, incluidos episodios controversiales que han marcado su carrera. En una entrevista con el músico Justin LaBoy en su podcast “The Download”, West puso como ejemplo su apoyo a Donald Trump en 2018, describiendo cómo su autismo influye en su toma de decisiones al forzarlo a mantenerse firme en sus opiniones a pesar de la oposición.
“’Usaré esta gorra de Trump porque me cae bien en líneas generales. Luego, cuando la gente te dice que no lo hagas, simplemente mantienes tu posición. Y ese es mi problema”, explicó.
West también hizo referencia a la presión que siente por parte de sus fanáticos, quienes a menudo le sugieren cómo debería hacer su música. Aseguró que, por el contrario, “cuando me dicen que haga un álbum de cierta manera, termino haciéndolo al revés”, en referencia a su canción Can’t Tell Me Nothing [‘No Puedes Decirme Nada’].
Es importante destacar que el autismo no se considera una enfermedad mental. En el pasado, Kim Kardashian, ex esposa de West, había comentado sobre los desafíos que implica manejar la salud mental de alguien con condiciones complejas, asegurando que las familias a menudo se sienten “impotentes”.
West había abordado su presunto diagnóstico de trastorno bipolar en varias de sus canciones, incluso haciendo referencia a la lucha que siente con su salud mental. La portada de su álbum “Ye” de 2018 incluye un comentario humorístico sobre su bipolaridad (‘Odio ser bipolar, es genial’), evidenciando su capacidad para reflexionar sobre su estado emocional.
En los últimos días, el artista generó controversia tras su aparición en los Grammy junto a Censori, quien llevaba un vestido transparente que dividió opiniones. Algunos críticos consideraron que el atuendo era provocativo, mientras que otros sugirieron que podría ser un reflejo de la influencia de West. En redes sociales, el rapero defendió su elección de vestimenta, describiendo el diseño como una “colaboración” creativa.
Al respecto, el productor ejecutivo de los Grammy, Raj Kapoor, comentó que el código de vestimenta de los premios está “abierto a interpretación”. Aclaró que, si bien hay normas para las presentaciones, la vestimenta de los asistentes es una cuestión que la Academia todavía debe abordar.
