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Los misioneros fueron raptados mientras se encontraban de regreso a sus hogares, luego de participar en el acto de inauguración de un orfanato.

Un grupo de 17 misioneros estadounidenses, entre ellos varios menores de edad, fue secuestrado por miembros del crimen organizado en Haití el pasado sábado, de acuerdo con un mensaje de voz enviado a varias misiones religiosas.

Los misioneros fueron raptados mientras se encontraban de regreso a sus hogares, luego de participar en el acto de inauguración de un orfanato, según afirma la organización Christian Aid Ministries, originaria del Estado de Ohio.

Apenas se conoció la noticia, desde la Casa Blanca se apresuraron a  asegurar que ya estaban al tanto de los informes sobre el secuestro.

“La seguridad y el bienestar de todos los estadounidenses que se encuentran en el extranjero ocupa el lugar más alto en las prioridades del Departamento de Estado”, expresó un portavoz del gobierno, negándose a ofrecer más información.

El secuestro de los misioneros ocurre pocos días después de que funcionarios estadounidenses de alto nivel visitaran Haití y se comprometieran a desembolsar más fondos para reforzar las fuerzas del orden, incluyendo  una inversión de unos 15 millones de dólares con el fin de paliar la violencia de las pandillas.

Haití se encuentra inmerso en una espinosa lucha contra la delincuencia organizada y los secuestros, los cuales han aumentado después de que el presidente Jovenel Moïse fuera asesinado a tiros en su residencia privada el 7 de julio, y del terremoto de magnitud 7.2 que sacudió el suroeste del país en agosto, causando la muerte de más de 2.200 personas.

Para liberar a las personas secuestradas, las bandas delincuenciales exigen montos que  van desde un par de cientos de dólares hasta más de un millón, según las autoridades.

Estos grupos han sido señalados de secuestrar desde niños en edad escolar, médicos y policías, hasta autobuses llenos de pasajeros, a medida aumenta su influencia en el territorio.

“La agitación política,  el aumento de la inseguridad alimentaria y de la desnutrición y el crecimiento de la violencia influyen en el empeoramiento de la situación humanitaria”, afirma un informe de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas para Haití (BINUH, por sus siglas en inglés). “Unas fuerzas policiales desbordadas y con escasos recursos para operar no puede abordar por sí misma los profundos problemas de seguridad de Haití”, agrega el escrito.

Alrededor de 330 víctimas de secuestro fueron notificadas a la Policía Nacional de Haití hasta el mes de agosto de 2021, en comparación con las apenas 234 registradas en todo el año 2020, según el mismo informe emitido por la BINUH.