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En su reciente libro llamado “Libertad”, la ex canciller alemana Angela Merkel ha realizado algunas revelaciones sorprendentes sobre diversos hechos de la política mundial, que van desde su juventud en Alemania del Este, hasta sus encuentros con Donald Trump y Vladimir Putin.

La obra de más de 700 páginas, en la que Merkel había estado trabajando desde que abandonara su cargo en 2021, se había mantenido en estricto secreto hasta su publicación esta semana. Utilizando un lenguaje más directo al no estar atada a las reglas de la diplomacia, Merkel describió a Trump como una persona “emocional”.

“Parecía que su principal propósito era hacer que su interlocutor se sintiera culpable. Pero, al mismo tiempo, tuve la impresión de que también quería que dicha persona sintiera simpatía por él”, expresó.

Asimismo, Merkel escribió que “Trump parecía sentirse fascinado con el presidente ruso [Vladimir Putin]”, añadiendo que “los políticos autocráticos y dictatoriales lo tenían esclavizado”.

De igual manera, recordó haber regresado profundamente desanimada de una visita a Estados Unidos, ya que juzgó que el mandatario de ese país “veía las cosas como el agente inmobiliario que era antes de entrar en política”.

“Para él, el resto de los países eran sus rivales, y los éxitos de uno representaban el fracaso del otro. No creía que la prosperidad para todos era posible mediante la cooperación”, afirmó.

Por otro lado, Merkel, quien habla ruso fluidamente, describió a Vladimir Putin como alguien manipulador y vengativo, aunque admitió que algunos de sus argumentos presentados en la famosa conferencia de seguridad de Múnich de 2007 eran totalmente válidos.

“Yo critiqué profundamente el hecho de que no se hubiese actualizado el tratado sobre fuerzas armadas convencionales en Europa (FCE, por sus siglas en inglés), el cual debió haberse ajustado luego de la disolución del Pacto de Varsovia y de la Unión Soviética, así como la adhesión de los países de Europa del Este a la OTAN”, aseveró.

En este sentido, Merkel manifestó su rechazo a la posición de varios líderes de Europa Oriental que pretendían marginar a Rusia. “Todo esto era infantil y reprensible. Puedes sacudir la cabeza, pero esto no hará desaparecer a Rusia del mapa”.

La ex funcionaria recordó un encuentro con Putin en el cual este le expresaba su temor por la adhesión de Ucrania a la OTAN. De acuerdo con ella, el presidente ruso le habría comentado: “Sé que no serás canciller para siempre. Cuando eso pase, ellos [Ucrania] serán miembros de la OTAN. Y quiero evitarlo”.