Missile
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La noche del sábado, los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán lanzaron más de 300 drones y misiles contra Israel, en lo que representa el primer ataque directo de Teherán contra Tel Aviv, amenazando con encender la llama de un conflicto regional a gran escala en Oriente Medio.

Funcionarios israelíes aseguraron que, gracias a la asistencia de las fuerzas de Estados Unidos, el Reino Unido y Jordania, fueron capaces de interceptar hasta un 99% de los proyectiles. No obstante, un número limitado de misiles balísticos penetraron el espacio aéreo israelí e impactaron en la importante base aérea de Nevatim, ubicada en el sur del país.

Al respecto, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, publicó un corto mensaje en la red social X en el que solo decía: “interceptamos, repelimos y todos juntos venceremos”; mientras que el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Daniel Hagari, aseguró que “el ataque iraní fue frustrado”.

Hasta ahora no existe información sobre una decisión israelí para responder a este ataque. Sin embargo, durante la tarde del domingo, Benny Gantz, uno de los miembros del gabinete de guerra, indicó que Israel “construirá una alianza regional para hacer pagar a Irán en la manera y en el tiempo más adecuados para nosotros”.

Entretanto, la misión permanente de Irán en la ONU justificó la llamada “Operación Promesa Verdadera” como una acción enmarcada en el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, el cual establece el derecho a la legítima defensa en caso de un ataque armado. En este sentido, el gobierno iraní argumenta que fue una represalia por el bombardeo israelí del consulado iraní en Damasco el 1 de abril, que se saldó con la muerte de 16 personas, entre ellas dos altos comandantes de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica.

Asimismo, mediante un comunicado publicado en la red social X, la representación diplomática destacó que, por ahora, “el asunto puede considerarse concluido”, aunque han alertado que “si el régimen de Israel incurre en otro error, nuestra respuesta será mucho más severa”.

De igual manera, el escrito advierte que “este es un conflicto entre Irán y el régimen israelí, del cual Estados Unidos debe mantenerse alejado”.

Cabe destacar que, desde el inicio de la guerra entre Israel y Gaza en octubre pasado, ha habido intercambios de disparos constantes entre las FDI y el movimiento libanés Hezbollah, financiado y entrenado por Irán. Sin embargo, un ataque directo de fuerzas iraníes hacia Israel era bastante improbable, ya que en múltiples ocasiones los líderes del país persa habían manifestado que no buscaban una guerra con Israel, la cual podría implicar a Estados Unidos y las potencias occidentales.