Credit: MRCTV

Los impuestos más insólitos del mundo

En la actualidad los impuestos son aportes obligatorios cuyo incumplimiento es penado por ley. Son los tributos más importantes, a través de los cuales, se obtiene la mayoría de los ingresos públicos. Con ellos, el Estado obtiene los recursos suficientes para llevar a cabo sus actuaciones, como, por ejemplo, la administración, infraestructuras o prestación de servicios.

A lo largo de la historia algunos impuestos han tenido tal impacto que han llegado incluso a provocar guerras. Estos son algunos de los impuestos más absurdos de la historia.

Impuesto por ser guapo: En Japón el economista Takuro Morinaga propuso aumentar los impuestos a los hombres solteros y físicamente agradables. La propuesta también abarca la reducción del gravamen a los que no son tan agraciados físicamente.

Impuesto por usar barba: El rey Enrique VIII de Inglaterra no tuvo mejor idea que imponer este impuesto con una tasa variable que dependía de la condición social de la persona. Además, usar barba era una señal de clase alta, por lo que quién la usaba era porque tenía suficiente dinero para pagar el impuesto.

Impuesto por gases de vaca: Esto se debe a que sus flatulencias contienen metano, uno de los principales causantes del calentamiento global, por lo que algunos países de la Unión Europea, cobran impuesto por cada vaca.

Impuesto a los inodoros: A partir de 2005, en Maryland, los habitantes deben pagar casi $30 al año por concepto de bajar la palanca de la taza del baño. Se está estudiando la posibilidad de incrementar dicha cuota, que muchos califican como injusta al tratarse de una necesidad fisiológica.

Impuesto a las ventanas: Los británicos encontraron otra forma de cobrar más impuestos a los más ricos. Entre más ventanas tenía tu casa, más pagabas. Esto se basaba en que las personas con dinero tenían casas con muchas ventanas.