El ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, ha sido relevado de su cargo, según la cadena de televisión estatal CCTV. El funcionario desapareció de la vista pública hace exactamente un mes, cuando participó en una reunión de altos diplomáticos de Rusia, Vietnam y Sri Lanka el 25 de junio.
Su ausencia había sido un tema de discusión interno en China y se había convertido en una de las mayores crisis para el presidente Xi Jinping desde el inicio de su tercer mandato el año pasado.
De acuerdo con el reporte de CCTV, Wang Yi, un veterano de la diplomacia china y principal asesor en materia de política exterior de Xi, ha asumido como nuevo ministro de Relaciones Exteriores.
Cabe destacar que, desde hacía algunas semanas, Wang había llevado a cabo ciertas tareas de su predecesor, como la asistencia a la cumbre de los BRICS en Sudáfrica, y diversas reuniones con los exsecretarios de Estado de Estados Unidos, Henry Kissinger y John Kerry.
Wang ya contaba con una amplia experiencia en el cargo, puesto que fue ministro de Relaciones Exteriores de China en el primer y segundo mandato de Xi antes del nombramiento de Qin en diciembre pasado.
La decisión de destituir a Qin fue tomada en una sesión extraordinaria del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional. Este comité se reúne habitualmente cada dos meses, pero su presidente puede programar una sesión extraordinaria para debatir casos puntuales.
Una multitud de rumores ha circulado en redes sociales y entre funcionarios extranjeros sobre el paradero de Qin. Sin embargo, Pekín ha mostrado cierto hermetismo al respecto, alegando que el ex ministro presentaba “problemas de salud” desde principios de este mes.
No obstante, este ocultamiento de la información por parte de las autoridades chinas ha despertado críticas generalizadas, tanto internas como externas, que podrían amenazar la credibilidad del gobierno y poner de manifiesto la opacidad de sus decisiones. También existe una creciente incertidumbre sobre el impacto que pueda tener la destitución de Qin en las relaciones de China con el mundo exterior.
Qin, que en su momento fue visto como uno de los hombres más cercanos a Xi Jinping, tuvo un ascenso meteórico desde sus inicios como portavoz del ministerio y viceministro de Relaciones Exteriores para asuntos europeos. En julio de 2021 fue enviado a Estados Unidos como nuevo embajador, para ser ascendido a ministro de Relaciones Exteriores a finales de 2022 y consejero de Estado en marzo pasado, un título que le otorgaba mayores poderes que un ministro del gabinete.
