El índice S&P 500, considerado como uno de los indicadores más fidedignos del estado real de la economía estadounidense, alcanzó el viernes un nuevo máximo histórico, lo que podría ser una señal de que la apatía que los consumidores habían mostrado durante cierto tiempo podría estar amainando.
El índice evidenció una subida de un 1.2% el viernes por la tarde, superando el récord alcanzado hace dos años. Desde finales de octubre, el indicador ha registrado un incremento de más del 17%.
Pocas horas antes de conocerse la noticia, la Universidad de Michigan publicó los resultados de su índice mensual de confianza del consumidor, el cual subió 9.1 puntos hasta los 78.8 puntos, el mayor incremento mensual desde el año 2005.
Según los expertos, estos números están apuntalados principalmente por las expectativas de que la tasa de inflación continuará disminuyendo. La investigación de la Universidad de Michigan refleja que los consumidores esperan un aumento de precios interanual del 2.9% para 2025, ligeramente por debajo del 3.1% reportado en diciembre.
No obstante, aunque parezca contradictorio, los ciudadanos estadounidenses también se han mostrado pesimistas con respecto al estado de la economía desde el final de la pandemia, a pesar de que el desempleo ha alcanzado su menor nivel en los últimos 50 años y los mercados bursátiles siguen disparándose. Esta situación ha creado desconcierto en la administración del presidente Joe Biden, que intenta hacer de su política económica (conocida como “Bidenomics”) uno de los pilares para su campaña de reelección.
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Empero, de acuerdo con Jared Bernstein, principal asesor económico de la Casa Blanca, los datos arrojados por la investigación de la Universidad de Michigan son una prueba de que las medidas económicas implementadas por Biden son están funcionando.
“Aún nos queda mucho trabajo por hacer, pero pienso que vamos por el camino correcto a medida que ejecutamos la agenda del presidente Biden, y la población está comenzando a sentir sus efectos”, expresó Bernstein. “Esto marca un contraste muy significativo con los planes de los republicanos de reducir los impuestos a los ricos y a las grandes corporaciones, e incrementar los costos de la atención médica para las familias trabajadoras”, agregó.
Cabe destacar que un trabajo publicado a principios de mes por el Banco de la Reserva Federal de Nueva York también encontró que los consumidores esperaban que la inflación disminuyera en el corto, mediano y largo plazo, al tiempo que las expectativas sobre el acceso al crédito y la situación financiera en general parecían mejorar.
