Petro obtuvo el 50.4 por ciento de los votos.
Gustavo Petro, un excombatiente guerrillero que prometió un profundo cambio social y económico, se ha alzado con la presidencia de Colombia en unas reñidas elecciones que marcan un histórico triunfo de la izquierda en el país andino.
Petro obtuvo el 50.4 por ciento de los votos, mientras que su rival Rodolfo Hernández, un magnate de la construcción con un marcado carácter populista, acumuló el 47.3 por ciento.
“A partir de hoy, Colombia ha cambiado. Lucharemos por un cambio real que nos conduzca a una de nuestras principales metas: la política del amor, de la comprensión y del diálogo”, expresó el nuevo mandatario colombiano ante sus seguidores en las calles de la capital, Bogotá.
La victoria de Petro, senador y exalcalde de Bogotá, representa cambio drástico en la política presidencial de un país que durante mucho tiempo ha percibido negativamente a la izquierda debido a que es asociada con el conflicto armado que asola a la nación sudamericana desde hace más de medio siglo. El propio Petro fue en su momento un miembro activo del ahora desaparecido movimiento M-19, y se le concedió una amnistía después de ser encarcelado por su participación en dicho grupo.
En su discurso de victoria, el candidato ganador, de 62 años, hizo un llamado a la unidad y a la conciliación, asegurando que todos los miembros de la oposición tendrán las puertas abiertas en el Palacio de Nariño “para debatir sobre los problemas de Colombia”.
“En este nuevo gobierno nunca habrá persecución política ni persecución legal, solo habrá respeto y diálogo”, declaró, y agregó que escuchará no solo a los que han levantado las armas sino también a “mayoría invisible compuesta por indígenas, campesinos, mujeres y jóvenes”.
El presidente saliente, el conservador Iván Duque, extendió sus felicitaciones a Petro luego de conocerse los resultados oficiales, mientras que Hernández reconoció no dudó en reconocer su derrota. “Acepto el resultado, como es mi deber, si deseamos tener instituciones fuertes”, aseveró el magnate. “Espero, de todo corazón, que esta decisión sea la más beneficiosa para todos”, agregó.
Esta campaña fue la tercera candidatura presidencial de Petro, y su victoria agrega a Colombia a una lista de países latinoamericanos que han elegido mandatarios progresistas en los últimos años. Petro se ha comprometido a combatir la desigualdad con educación universitaria gratuita, reformas de pensiones y altos impuestos sobre tierras improductivas. También se comprometió a implementar completamente un acuerdo de paz de 2016 con los rebeldes de las FARC y a buscar conversaciones con los militantes aún activos del ELN.
