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Una filtración de una conversación ultrasecreta de oficiales alemanes obtenida por medios rusos asegura que efectivos militares británicos ya se encuentran “en el campo de batalla” en Ucrania, apoyando a las fuerzas de Kiev en la operación de los sistemas misilísticos Storm Shadow de largo alcance,

El Kremlin dijo que la filtración demostraba la participación directa del “Occidente colectivo” en la guerra en Ucrania, mientras que ex ministros de defensa británicos expresaron su frustración con el ejército alemán en respuesta a las revelaciones.

La grabación, confirmada por Alemania como auténtica, fue publicada por la jefa del canal de noticias Russia Today (RT), Margarita Simonyan. En ella aparecen algunos oficiales de la fuerza aérea alemana, la Luftwaffe, debatiendo sobre cómo los misiles Taurus suministrados por Berlín podrían servir para destruir el puente de Kerch, que une al resto de Rusia con la península de Crimea.

En el audio, el jefe de la Luftwaffe, Ingo Gerhartz, también dio detalles de cómo los efectivos británicos han apoyado a Ucrania en el despliegue del sistema de misiles de largo alcance Storm Shadow, utilizado para atacar objetivos a más de 200 kilómetros de distancia de la retaguardia rusa.

“Sé cómo planifican sus misiones los ingleses; ellos lo hacen a través del reachback [apoyo a distancia]. También tienen personal sobre el terreno, pero los franceses no”, expresó Gerhartz.

En palabras de Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, esta filtración pone de manifiesto “la participación directa del Occidente colectivo en Ucrania”. No obstante, a pesar de haberse confirmado la veracidad de la grabación, el ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius, señaló que Rusia intenta librar “una guerra de información” contra su país y el resto de las potencias occidentales.

Cabe destacar que esta situación se produjo luego de que, hace algunos días, el canciller Olaf Scholz diera marcha atrás a la propuesta de entregar misiles Taurus a Ucrania, argumentando que esto convertiría a Alemania en un “participante activo en la guerra”.

“De ninguna manera los soldados alemanes podrán estar vinculados con los objetivos que pueda alcanzar el sistema Taurus”, expresó Scholz.

Entretanto, la semana pasada, el gobierno del Reino Unido admitió que un “un pequeño número de efectivos” se encuentra en Ucrania, aunque evitó hacer mención al tipo de operaciones que estaban llevando a cabo. Esto ha generado inquietud tanto a nivel local como internacional, ya que la confirmación de cualquier participación británica en los combates podría ser considerada como motivo suficiente para una escalada por parte de Rusia.