Whitehouse
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El Servicio Secreto de Estados Unidos anunció este jueves el cierre de la investigación que realizaba sobre la cocaína encontrada en la Casa Blanca a principios de este mes, alegando que “no se pudo identificar a un sujeto de interés”.

Mediante un comunicado oficial, el organismo explicó que la droga fue hallada el pasado 2 de julio “en un receptáculo en el que se almacenan dispositivos electrónicos y personales cerca del ala oeste“, y que estaba realizando una “revisión metódica de los sistemas y protocolos de seguridad” a fin de descubrir la forma en la que la sustancia ingresó al recinto. También reveló que se creó una lista de “varios cientos de personas que pudieron acceder al área”.

Sin embargo, los resultados de las pesquisas determinaron que no existían “huellas dactilares latentes ni ADN suficiente para contrastar la investigación”.

“Por ende, el Servicio Secreto no puede comparar la evidencia con la lista de individuos”, expresa el comunicado, acotando que, en efecto, la sustancia hallada “se trataba de cocaína”.

La medida no tardó en levantar comentarios en la comunidad política estadounidense. Por ejemplo, la polémica representante republicana por Colorado, Lauren Boebert, aseguró que, al ser inquirido sobre las medidas de seguridad del receptáculo, el Servicio Secreto reveló que la llave del casillero en el que se encontró la cocaína no pudo ser hallada.

“Existen más de 180 casilleros en esa área, y la llave del número 50, donde se encontró la cocaína, está perdida”, expresó la funcionaria. “Quieren cerrar rápidamente esta investigación para pasar a una nueva crisis de Biden”, añadió.

Por su parte, la representante por Carolina del Sur, Nancy Mace, se abstuvo de realizar señalamientos, aunque indicó que “es frustrante que cada vez que sucede algo desagradable en la Casa Blanca, o en torno al presidente o a su familia, no podamos encontrar respuestas”.

A lo largo de los últimos días han salido a la luz informes contradictorios sobre dónde se encontró la cocaína. En un principio, se reportó que la sustancia se había encontrado en la biblioteca de la Casa Blanca. No obstante, la secretaria de prensa, Karine Jean-Pierre, aseguró en un encuentro con los periodistas que el hallazgo había ocurrido en una parte del ala oeste. Posteriormente, se informó que la cocaína había sido detectada en la entrada del Ejecutivo Oeste, una zona calificada como segura.

Por su parte, la Casa Blanca mencionó que el incidente ocurrió mientras el presidente Biden y su familia estaban en Camp David, una de las residencias oficiales del presidente, ubicada en Maryland.