Tres militares estadounidenses perdieron la vida y más de una treintena resultaron heridos el fin de semana como consecuencia de un ataque con aviones no tripulados contra una base del país norteamericano en la frontera entre Jordania y Siria.
La autoría del atentado contra la base llamada Torre 22, ubicada en las cercanías de la triple frontera entre Jordania, Siria e Irak, fue reivindicada por el grupo Resistencia Islámica de Irak, que cuenta con el firme apoyo de Irán, por lo cual los funcionarios estadounidenses no han dudado en señalar al gobierno de ese país como el principal responsable.
Las autoridades de Estados Unidos anunciaron la apertura de una investigación para determinar por qué los dispositivos de defensa de la base no fueron capaces de repeler los drones. Ha trascendido que varios de los militares heridos sufrieron lesiones graves, por lo que el número de víctimas podría aumentar en las próximas horas.
Cabe destacar que, en los últimos meses, las fuerzas estadounidenses han estado sometidas a una andanada de ataques continuos con aviones no tripulados y misiles en Irak y Siria como consecuencia de la guerra de Israel contra Hamás. Sin embargo, este incidente marca un peligroso acercamiento a un conflicto directo entre Estados Unidos e Irán, algo que ambas partes han reiterado que desean evitar.
Los grupos islamistas respaldados por Irán han procurado desde hace muchos años la expulsión de las tropas estadounidenses de Irak y Siria, pero la guerra en Gaza ha servido como excusa perfecta para intensificar sus esfuerzos e intentar expandir sus acciones en el campo de batalla.
En un comunicado oficial, el presidente Joe Biden indicó que su administración hará que “todos los responsables rindan cuentas en el momento y de la forma que elijamos”.
“Hoy [domingo], el corazón de Estados Unidos está roto. Anoche, tres miembros de nuestro servicio murieron y muchos otros resultaron heridos en un ataque aéreo no tripulado contra nuestras fuerzas asentadas en el noreste de Jordania, cerca de la frontera con Siria”, explicó el mandatario. “Aunque todavía estamos reuniendo información, sabemos que fue llevado a cabo por grupos radicales respaldados por Irán en Siria e Irak”, agregó.
Por su parte, la Resistencia Islámica en Irak también emitió un comunicado en el que advertía que “si Estados Unidos continúa apoyando a Israel, habrá escaladas”.
“Todos los intereses estadounidenses en la región son considerados objetivos legítimos, y no nos preocupan sus amenazas. Sabemos qué camino estamos tomando, y el martirio será nuestro premio”, aseguró la agrupación.
