Beterbiev mantuvo su récord de 100% de sus victorias por la vía del nocaut.
El boxeador ruso Artur Beterbiev mantuvo su récord de 100% de sus victorias por la vía del nocaut al derrotar al británico Anthony Yarde en ocho emocionantes asaltos, logrando así defender sus tres títulos de peso semipesado la noche del sábado.
Con 38 años de edad, Beterbiev (19-0, 19 KOs) se encuentra en estos momentos en lo que podría ser el pico de su carrera, luego de demoler al excampeón estadounidense Joe Smith en una pelea de unificación en junio y ahora a Yarde, a quien derribó con una andanada de golpes culminada con una derecha aplastante en su combate escenificado en el OVO Arena en Wembley, Inglaterra.
No obstante, el ruso avecindado en Canadá tuvo que superar algunos momentos difíciles a lo largo de la contienda, con un Yarde que conectaba contundentes golpes que causaron verdadera preocupación en la esquina del campeón.
“No creo que tuviera mala pelea, pero si me tocase volverla a hacer, lo haría mejor. Ahora me siento bien”, dijo Beterbiev.
“En esta categoría todos los boxeadores pegan fuerte, y Anthony no es la excepción; tiene 31 años, es joven aún. Espero que le vaya bien en el futuro”, añadió el nacido en Chechenia, Rusia.
Esta victoria aumenta la demanda de Beterbiev, campeón del CMB, la FIB y la OMB, para enfrentar a su compatriota y flamante campeón de la AMB, Dmitry Bivol (21-0, 11 KOs), quien se encuentra en un estado de forma espectacular luego de sendas victorias sobre Saúl ‘Canelo’. Álvarez y Gilberto Ramírez el año pasado.
Yarde (23-3, 22 KOs), por su parte, sufrió su segunda derrota por nocaut de su carrera, las dos ante rivales rusos. En 2019, fue detenido en el undécimo asalto por Sergey Kovalev por el cinturón de la OMB.
El británico comenzó bien el combate y no mostró signos de sentirse intimidado por el formidable récord de Beterbiev.
Durante los primeros asaltos, la velocidad de Yarde se impuso y Beterbiev mostraba dificultades para conectar sus golpes. El checheno sabía que estaba en una de las peleas más duras de su carrera profesional y durante el sexto asalto quedó con sangre goteando por encima de su ojo izquierdo.
Yarde se mantuvo competitivo a lo largo de la pelea, pero el campeón mostró la calidad de su finalización en el octavo asalto cuando conectó un recto de derecha que hizo girar al londinense, antes de que otro derechazo lo depositara en la lona.
El púgil retador logró ponerse de pie con las piernas temblorosas después de un conteo y cuando Beterbiev reanudó su ataque, el árbitro Steve Gray detuvo rápidamente el pleito después de que el entrenador de Yarde, Tunde Ajayi, se subiera al borde del ring e hiciera una señal para detener las acciones.
