Álvarez podría buscar una revancha con el ruso Dmitry Bivol el próximo año para intentar vengar la derrota sufrida en mayo pasado.

El boxeador mexicano Saúl “Canelo” Álvarez retuvo su campeonato indiscutible de peso súper mediano el sábado en el T-Mobile Arena de Las Vegas mediante una victoria por decisión unánime sobre su archirrival Gennadiy “GGG” Golovkin, dando así por concluida una de las trilogías más esperadas de los últimos tiempos.

Álvarez (58-2-2, 39 KOs) comenzó marcando el ritmo del combate mientras Golovkin trabajaba con su jab y mostraba cautela al lanzar su recto de mano derecha, el golpe que lo lanzó al estrellato y lo convirtió en una leyenda del peso mediano. No obstante, ya en la recta final del combate, el kazajo aumentó su volumen de golpeo y ganó cuatro de los últimos cinco rounds en dos tarjetas de puntuación, aunque esto resultó insuficiente.

Dos jueces lo anotaron 115-113 para Álvarez, mientras que un tercer juez lo tuvo 116-112.

Luego de la última campanada, mientras se abrazaban, Álvarez le dijo a Golovkin: “Gracias por todo, mi amigo. Le dimos a nuestros aficionados tres buenas peleas”.

Álvarez, quien posee los cuatro cinturones de las 168 libras, podría buscar una revancha con el ruso Dmitry Bivol el próximo año para intentar vengar la derrota sufrida en mayo pasado. Sin embargo, una lesión en la muñeca izquierda del mexicano podría posponer estos planes. De acuerdo con miembros de su equipo médico, “Canelo” habría sufrido un desgarro en el cartílago de su muñeca y, en caso de necesitar cirugía, requeriría de 6 a 12 semanas de rehabilitación.

“Me cuesta hasta sostener un vaso”, dijo Álvarez, de 32 años. “Es una lesión realmente molesta, pero soy un guerrero”.

“He pasado por muchos momentos complicados, pero lo único que puedo hacer es continuar hacia adelante”, aseguró el nativo de Guadalajara. “He sufrido bastante con mis derrotas, pero he demostrado que estas te permiten regresar más fuerte y con mayor humildad”, agregó.

Por su parte, Golovkin, de 40 años de edad, negó que este revés sería el punto final de su carrera.

“Recuerden que todavía poseo dos títulos en las 160 libras. Volveré a ese peso; sigo siendo campeón”, expresó “GGG”.

“Este tipo de peleas es muy táctico. Hoy, Canelo fue el mejor. Felicidades a Canelo”.

Golovkin estaba abajo en las tres tarjetas de los jueces al entrar en la recta final, por lo que decidió acelerar el paso. Comenzó a soltar su temible mano derecha y conectó algunos golpes en el round 9 que forzaron a Álvarez a mantenerse en las cuerdas.

Los siguientes rounds siguieron la misma tónica, con un “GGG” intentando recuperar el terreno perdido.

“En la segunda parte me sentí bien”, dijo Golovkin. “En esta pelea teníamos que actuar de forma inteligente. Es como jugar ajedrez”.