Moon
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China explorando las posibilidades que ofrece la tecnología de impresión 3D para construir edificios en la Luna.

Científicos chinos han anunciado que utilizarán el futuro vehículo lunar Chang’e 8 para realizar pruebas dirigidas a explorar las posibilidades que ofrece la tecnología de impresión 3D para construir edificios en la Luna.

Wu Weiren, miembro destacado de la Academia de Ingeniería de China y de la Administración Nacional del Espacio de China, aseguró que Chang’e 8, la tercera sonda enviada por el país asiático hacia nuestro satélite, realizará investigaciones in situ sobre el medio ambiente y la composición mineral en el lugar de aterrizaje, ubicado en el polo sur de la Luna. Asimismo, indicó que posteriormente enfocará sus esfuerzos en el uso de la impresión 3D utilizando materiales lunares.

“Si nuestro propósito es permanecer en la Luna por largos períodos, es preciso establecer bases construidas con los propios materiales de la luna”, explicó el académico en una entrevista reciente.

“El suelo lunar será la materia prima, y la impresión será el método utilizado para crear los materiales de construcción. Varios académicos en diversas universidades a nivel nacional ya han comenzado a estudiar las posibles aplicaciones de la tecnología de impresión 3D en la Luna”, añadió.

Chang’e 5, el más reciente desarrollo de China en su programa de exploración lunar, ya ha recolectado varias muestras del lado visible del cuerpo celeste. La próxima misión robótica Chang’e 6, planeada para ser lanzada en 2025, aterrizará en el lado oculto y también traerá muestras de suelo y rocas.

“Si Chang’e 6 tiene éxito, será la primera vez que obtengamos muestras del lado oculto de la Luna”, aseguró Wu.

Es importante mencionar que el lado oculto de la Luna ha sido fotografiado por varias naves espaciales, comenzando por la sonda Luna 3 en 1959, pero ninguna había logrado posarse sobre su superficie hasta enero de 2019, cuando la misión china Chang’e 4 lo hizo en el cráter Von Karman.

De acuerdo con Wu, después de Chang’e 6, la sonda Chang’e 7 será enviada al Polo Sur lunar para “buscar rastros de agua, y estudiar el medio ambiente y el relieve”.

“Chang’e 7 también ejecutará labores de detección de recursos en el subsuelo de la Luna. Estamos evaluando la posibilidad de diseñar los dispositivos necesarios para realizar excavaciones y estudiar las estructuras subterráneas y su composición”, añadió el científico.

A largo plazo, los investigadores chinos utilizarán los componentes de las tres próximas misiones (los orbitadores, los módulos de aterrizaje, los rovers y los sensores) para tratar de conformar una base científica robótica como punto central de la colaboración internacional en la exploración lunar.