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La tasa de inflación se ubicó en 9.4% en los últimos 12 meses hasta junio.

Los precios continúan aumentando en el Reino Unido a su ritmo más rápido en más de 40 años, alimentados principalmente por la subida de los costos de los combustibles y los alimentos.

Según la Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido (ONS, por sus siglas en inglés), la tasa de inflación se ubicó en 9.4% en los últimos 12 meses hasta junio, registrando un ligero salto desde el 9.1% de mayo.

Los precios de la gasolina subieron 18.1 peniques (0.22 dólares) por litro en junio, mientras que los costos de la leche, el queso y los huevos también se elevaron, dijo la ONS.

En vista de esto, los sindicatos han pedido aumentos salariales para ayudar a los trabajadores a paliar el aumento del costo de vida, que pulveriza los presupuestos familiares.

Los precios los combustibles se han disparado en los últimos meses, impulsados ​​por la guerra en Ucrania y las medidas de la Unión Europea para sancionar a la economía de Rusia y reducir su dependencia del petróleo y gas importados desde este país.

El precio promedio de la gasolina se situó en 184 peniques (2.24 dólares) por litro en junio, el más alto del que se tenga registro, y muy por encima de los 129.7 peniques (1.55 dólares) del año anterior. Por su parte, el precio promedio del diésel en junio fue de 192.4 peniques (2.31 dólares) por litro, marcando también un récord absoluto.

Los alimentos también mostraron una tendencia alcista. La leche, el queso y los huevos experimentaron aumentos importantes en junio, según la ONS, al igual que las verduras, la carne y los platos preparados.

De acuerdo con la firma analítica Kantar, la canasta promedio en un supermercado rondará las 454 libras esterlinas este año. Asimismo, se prevé que las facturas de energía, que aumentaron una cifra sin precedentes de 700 libras al año el pasado mes de abril para los hogares, vuelvan a subir en octubre.

Otros países del mundo también están experimentando problemas con el costo de vida, y muchos se ven afectados por los mismos factores globales que el Reino Unido. No obstante, la tasa de inflación británica es actualmente más alta que la de Estados Unidos y otros países de Europa, como Alemania (8.2%) o Francia (6.5%).

Según Paul Dales, de la consultora Capital Economics, la inflación del Reino Unido tiene sus orígenes en dos factores: el aumento de los precios de la energía y la escasez de trabajadores.

Acotó que, aunque el mercado laboral del Reino Unido es “tan duro como en Estados Unidos”, es probable que los trabajadores británicos hayan mostrado ser “más capaces de negociar salarios más altos”, dándole así un mayor impulso a la inflación.