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El sábado, una multitud irrumpió en la cámara legislativa por segunda vez pocos días.

Seguidores del clérigo chiíta iraquí Muqtada al-Sadr han comenzado a prepararse para una larga toma del parlamento iraquí, profundizando aún más la crisis política que se vive desde hace meses.

El sábado, una multitud irrumpió en la cámara legislativa por segunda vez pocos días. Esta es una nueva medida de presión luego de que las elecciones del pasado octubre no condujeran a la formación de un gobierno.

“Los manifestantes realizarán una nueva toma hasta nuevo aviso”, afirmó la organización de al-Sadr en un comunicado publicado por la agencia estatal de noticias INA.

Casi 10 meses después de las elecciones de octubre, Irak sigue sin un nuevo gobierno a pesar de las intensas negociaciones entre facciones. La formación de un gobierno ha sido un problema recurrente en el país árabe desde la invasión de 2003 encabezada por Estados Unidos que derrocó a Saddam Hussein.

Los partidarios de al-Sadr, que alguna vez dirigió una milicia contra las fuerzas gubernamentales estadounidenses e iraquíes, se oponen a la elección del bloque chií dirigido por Mohammed Shia al-Sudani, a quien acusan de tener estrechos vínculos con Irán.

“No queremos al señor al-Sudani”, dijo un manifestante. Agregó que estaba mostrando su descontento contra “un gobierno corrupto e incapaz” y que “dormiría” en los jardines del recinto parlamentario.

El domingo por la mañana, los ocupantes observaron el mes musulmán de Muharram con cánticos religiosos y comidas colectivas.

“Esperábamos lo mejor, pero obtuvimos lo peor. Los políticos que están en el parlamento no nos han ayudado en nada”, expresó otro de los manifestantes, Abdelwahab al-Jaafari.

Algunos pasaron la noche dentro del parlamento con mantas extendidas sobre el suelo, mientras que otros salieron a los jardines y se acostaron sobre colchonetas de plástico bajo las palmeras.

El bloque de Al-Sadr se erigió como la facción parlamentaria más grande, pero aún se ubicó muy lejos de lograr una mayoría, lo que provocó el vacío político más largo del país desde 2003.

En junio, los 73 legisladores de al-Sadr presentaron su renuncia, algo que fue visto como un mecanismo de presión sobre sus rivales para intentar formar un gobierno.

Debido a esto, el bloque llamado Marco de Coordinación, que muestra una postura favorable a la influencia de Irán, se convirtió en el más grande del parlamento, aunque tampoco fue capaz de lograr un acuerdo sobre el nombramiento de un nuevo primer ministro, presidente o gabinete.

La manifestación del sábado se produjo tres días después de que una multitud de partidarios de al-Sadr ingresara al parlamento el pasado miércoles.