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El bombardeo es el primer ataque estadounidense oficialmente reconocido desde que Biden decidiera retirar al grueso de sus tropas.

El presidente estadounidense, Joe Biden, aseguró este lunes que, en medio de un ataque con drones en Afganistán durante el fin de semana, el líder del movimiento Al Qaeda y sucesor de Osama bin Laden, Ayman al-Zawahri, resultó asesinado.

“Se ha hecho justicia y este líder terrorista ha desaparecido”, expresó el mandatario desde la Casa Blanca.

El bombardeo, que se produjo el sábado por la noche, es el primer ataque estadounidense oficialmente reconocido desde que Biden decidiera retirar al grueso de sus tropas de Afganistán en agosto pasado.

Al-Zawahri, de 71 años, se encontraba en una residencia en el centro de Kabul cuando fue alcanzado por dos misiles, de acuerdo con funcionario estadounidense al tanto de la situación.

Según este funcionario, la operación solo habría matado a al-Zawahri. Ninguno de los miembros de su familia fue alcanzado por los proyectiles.

Biden, quien aún se encuentra recuperándose de un nuevo positivo por COVID-19, calificó a al-Zawahri como “el autor intelectual” de varios ataques contra el país norteamericano. El occiso fue el principal colaborador de bin Laden durante los ataques terroristas del 11 de septiembre en 2001 y ayudó a llevar a cabo el atentado contra el USS Cole en 2000 y los ataques con explosivos contra las embajadas estadounidenses en Tanzania y Kenia en 1998.

“Él [al-Zawahri] fue el responsable del asesinato y de actos de violencia contra ciudadanos, funcionarios, diplomáticos e intereses estadounidenses”, dijo Biden. “El mundo ya no debe temer a este asesino”.

El presidente también describió el operativo como un “éxito total”, y que fue planificado para evitar bajas civiles.

“Después de analizar meticulosamente la evidencia presentada sobre su ubicación, decidí aprobar el ataque de precisión que lo eliminaría de una vez por todas”, afirmó Biden.

Según fuentes de inteligencia estadounidense, la muerte de al-Zawahri representa un duro golpe para la capacidad operativa de Al Qaeda en todos sus niveles. Biden aseveró que el fallecido terrorista era la cabeza estratégica del grupo y que existe evidencia audiovisual que muestra los preparativos para nuevos ataques contra Estados Unidos.

Aunque mantuvo un perfil comunicacional relativamente bajo durante los últimos años, las autoridades estadounidenses siempre mantuvieron un ojo sobre al-Zawahri, un médico y cirujano oftalmólogo egipcio que comenzó como mentor de bin Laden cuando ambos se conocieron en Afganistán en la década de 1990.

Durante años, los dos trabajaron mano a mano para desarrollar el alcance y las capacidades terroristas globales de Al Qaeda, con bin Laden fungiendo como rostro visible de la organización y al-Zawahri como estratega y experto en teología islámica.