University Campus
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Tres personas perdieron la vida y otra fue gravemente herida el miércoles, luego de que un hombre abriera fuego indiscriminadamente en el campus de la Universidad de Nevada en Las Vegas (UNLV), según funcionarios de policía, quienes aseguraron que el tirador también resultó muerto.

A las 11:45 a.m., los estudiantes y profesores se vieron obligados a atrincherarse en aulas y dormitorios luego de recibir una alerta sobre un tirador activo en las instalaciones de la universidad.

Pasado el mediodía, el departamento de policía informó que el sospechoso había sido encontrado y que había fallecido. Horas después se pudo conocer que el individuo respondía al nombre de Anthony Polito, de 67 años, quien era un profesor universitario desempleado.

De acuerdo con las autoridades, el incidente comenzó en el cuarto piso del edificio de la Escuela de Negocios de la UNLV, y estiman que Polito habría logrado subir a varios pisos antes de ser abatido en las afueras del recinto. No obstante, informaron que la amenaza había sido neutralizada y que los cuerpos de seguridad estaban en contacto directo con las víctimas del suceso.

Vincent Pérez, docente adscrito a la UNLV, detalló que el arma “sonaba como un arma de alto poder, lo cual nos hizo darnos cuenta de que se trataba de alguien que estaba intentando matar personas”.

A pesar de que varios reportes señalaban que el sospechoso había muerto, la universidad dijo que la policía proseguía con las labores de evacuación y que todas las instalaciones de la UNLV permanecerían cerradas por el resto del día.

La universidad pública, que cuenta con una matrícula de más de 30.000 estudiantes, está ubicada aproximadamente a dos kilómetros del boulevard de Las Vegas. La institución también se encuentra relativamente cerca del lugar donde ocurrió la masacre en un festival de música en 2017 que se saldó con 58 muertos y cientos de heridos, siendo este el peor tiroteo masivo en la historia de Estados Unidos.

Cabe destacar que lo ocurrido en la UNLV tuvo lugar tan solo un día después de que un presunto ex militar segara la vida de seis personas e hiriera a otras tres en Austin, Texas.

A principios de esta semana, Estados Unidos batió su propio récord de tiroteos masivos por año. Una serie crímenes con armas de fuego elevó la cifra a 38 incidentes en los que cuatro o más personas, sin incluir al tirador, fueron asesinadas a disparos. El máximo anterior, registrado el año pasado, había sido de 36.