Pink Floyd
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La legendaria agrupación británica Pink Floyd habría llegado a un acuerdo con Sony para vender su catálogo musical, su nombre y su imagen, por un monto que ascendería a unos 400 millones de dólares.

Según el diario The Financial Times, la banda de rock, fundada en Londres en 1965, habría acordado vender los derechos sobre su catálogo, nombre e imagen, pero no aquellos relacionados con sus composiciones.

Esta negociación, que ha sido descrita por los medios especializados como “una de las más grandes de los últimos años”, llega después de décadas de disputas entre los miembros del grupo por la gestión creativa y económica, fomentadas principalmente por su bajista y cofundador, Roger Waters.

Cabe destacar que, ya desde 2022, diversos reportes de prensa especulaban sobre la intención de Pink Floyd de vender todo su catálogo musical y otros activos por una suma de 500 millones de dólares. No obstante, se dijo que algunos potenciales compradores decidieron dar un paso atrás debido a los polémicos comentarios de Waters relacionados con la política mundial, en especial sobre Estados Unidos, Ucrania e Israel.

En este sentido, el veterano músico indicó en una entrevista con la revista Rolling Stone que la guerra que enfrenta a Rusia y Ucrania desde febrero de 2022 “no ocurrió sin una provocación previa” por parte de Kiev. Por esta razón, a petición de Moscú, Waters participó en una sesión del Consejo de Seguridad de la ONU llevada a cabo en 2023, en la cual reafirmó su argumento.

Pocos meses después, Waters fue objeto de investigación por parte de las autoridades alemanas por haber portado una vestimenta sorprendentemente similar a la de los oficiales de las SS nazis en un concierto que tuvo lugar en Berlín.

Posteriormente, salió airoso de una batalla legal contra la ciudad de Frankfurt debido a presuntas acusaciones de antisemitismo por parte de varias organizaciones civiles, las cuales lo calificaron como “uno de los antisemitas más conocidos del mundo”. Este litigio habría iniciado debido a que, en uno de sus conciertos, Waters utilizó un globo con forma de cerdo con una estrella de David pintada como parte de la utilería del espectáculo. Sin embargo, el artista siempre ha rechazado tales señalamientos de antisemitismo.

A principios de este año, se pudo conocer que la empresa de derechos musicales BMG había decidido terminar su relación con Waters, a causa de sus declaraciones sobre la situación actual en Ucrania y en Oriente Medio.