Varios de los principales fabricantes de automóviles japoneses han detenido las exportaciones a Rusia.
Varios de los principales fabricantes de automóviles japoneses han detenido las exportaciones a Rusia, al tiempo que las aerolíneas del país del sol naciente también anunciaron la suspensión de los vuelos a Europa en respuesta a la guerra en Ucrania.
Toyota, el mayor fabricante automotriz mundo, dijo el jueves que detendría las exportaciones a Rusia y la producción en el país, ya que las sanciones lideradas por Occidente contra Moscú afectaron la logística y cortaron las cadenas de suministro.
La medida se produce después de que Honda y Mazda anunciaran el cese de las exportaciones a Rusia, citando dificultades similares en la adquisición de piezas y obstáculos logísticos.
Mitsubishi, por su parte, dijo que podría suspender la producción y las ventas en Rusia. Por el contrario, Nissan ha asegurado que continuará con sus operaciones en el país mientras monitorea la situación.
“Toyota está siguiendo con gran preocupación la situación en Ucrania debido al riesgo para la seguridad de las personas en ese país y espera un regreso seguro a la paz lo antes posible”, expresó la compañía mediante un comunicado oficial.
Toyota es la principal marca japonesa en Rusia y produce alrededor de 80.000 vehículos en su planta de San Petersburgo, que cuenta con alrededor de 2.000 empleados.
Mientras tanto, Japan Airlines y ANA Holdings dijeron que cancelarían todos los vuelos hacia y desde Europa el jueves, citando riesgos a la seguridad a causa del conflicto en Ucrania.
Las aerolíneas, que normalmente utilizan el espacio aéreo ruso para sus vuelos a Europa, se unen a un número creciente de compañías que han cancelado o desviado vuelos desde y hacia Europa y Asia a raíz de la crisis.
No obstante, es importante resaltar que las aerolíneas japonesas no han sido prohibidas en el espacio aéreo ruso, a diferencia de las aerolíneas de Canadá y la Unión Europea, cuyos vuelos han sido prohibidos por Moscú en represalia por las restricciones en su contra.
Si bien docenas de marcas occidentales, como Apple, Amazon, H&M y Nike, han tomado medidas para distanciarse de Rusia, las principales empresas de Asia se han mantenido al margen de la crisis.
Japón, un aliado cercano de Estados Unidos, ha impuesto las sanciones más fuertes contra Moscú entre los gobiernos de la región asiática, la mayoría de los cuales se ha negado a condenar las acciones de la administración de Putin. Además de Japón, solo Corea del Sur, Singapur y Taiwán han anunciado medidas contra el Kremlin.
